Las guerras del agua
Carlos Murillo González
Este verano basta de cortes injustos al suministro
de agua en
deudores de casa habitación.
La Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS) de Ciudad Juárez,
realiza cortes de suministro de agua en casas habitación. Esta acción es
violatoria a derechos humanos y contradice además, la constitución. En pocas
palabras, la JMAS está violando la ley. El derecho al agua no se negocia.
El agua es fundamental para la vida y cualquier persona, empresa o
institución que atente contra ella, por ejemplo, monopolizando mantos de agua
dulce, privando del acceso a determinados grupos y personas, o contaminándola
vertiendo desechos y desperdicios, está cometiendo un acto criminal. Sin
embargo la realidad del agua es precisamente su rápido deterioro y escasez
gracias en gran parte a la humanidad. Como “seres inteligentes” que nos
autonombramos como raza superior entre todas las especies animales, es asunto
humano tomar consciencia del daño hecho por nuestra intervención en la
naturaleza.
El agua y la guerra
Foro sobre minería y contaminación. |
Insisten las y los expertos desde mediados del siglo pasado, sobre
el aumento de los conflictos por el vital líquido, desencadenantes de protestas
y desenlaces bélicos. En la Tierra (cuyo nombre correcto debería ser Agua, dadas las características
acuíferas de la superficie de este planeta azul) menos del 3% del total de sus
aguas son dulces; es decir, apenas una mínima parte del agua es potable en
nuestro hábitat.
Capitalismo y ecocidio
La rápida tendencia a la privatización del agua en el mundo para
fines lucrativos, está acelerando la escasez, provocando transformaciones en el
medio ambiente y afectando a miles de especies vegetales y animales, incluyendo
al humano. La situación más crítica es en aquellos países donde, por sus
características geográficas, demográficas y político-económicas, están siendo
vulnerables a ser afectados por los intereses capitalistas adversos a los
intereses de la sociedad y de la vida.
El agua en el Estado neoliberal
Psicóloga Verónica Arnal sobre contaminación del agua por minas. |
En las regiones, naciones, estados y ciudades donde la forma de
gobierno obedece al modelo neoliberal, se están cometiendo verdaderos atracos a
la luz del día: se violan leyes, se pierden derechos o se hacen reformas
constitucionales para favorecer la privatización de los recursos naturales. No
conforme con esto, además se protege a las empresas privadas, se criminalizan o
reprimen protestas sociales, se asesinan ecologistas, se despoja a los pueblos
originales de sus territorios y se condena como “terrorismo o terrorista” a
todo aquel, aquella y aquello que vaya en pro de la defensa del agua.
Conflictos en México y el mundo
Desafortunadamente hay muchos ejemplos de conflictos generados por
la enajenación del agua: si usted hace una búsqueda por internet, va a encontrar
más de 17 millones sobre el tema “conflictos por el agua” y casi 30 millones si busca “guerras por el
agua”. Es tal el nivel del problema, que bien podría organizar búsquedas por
continente, región, país, hasta llegar a casos de provincias, ciudades o
barrios y en todas va a encontrar mucha información.
Foro sobre apertura minera en Samalayuca y su posibles efectos ambientales, con Javier Meléndez, presidente seccional de Samalayuca. |
En México, la ruta de los conflictos por el agua es paralela a
nuestra forma de organización jerárquica patriarcal autoritaria que causa
tantos contratiempos a la sociedad mexicana: la escasez no sólo se debe a fenómenos
naturales como la sequía, también hay graves problemas por su disponibilidad (mala repartición,
acumulación elitista, sobre explotación de mantos acuíferos…) es decir, son problemas de intereses generados: la
minería, el fracking, el agua
embotellada, entre otros, son los más
beneficiados y a la vez los menos responsables de la contaminación, la
desertificación o la persecución y muerte de ecologistas, en complicidad con
políticos sin escrúpulos como el gobernador Moreno Valle (PAN) de Puebla o las
y los actuales diputados federales que apoyan la iniciativa de Ley General de
Agua y sin los cuales empresarios criminales como Germán Larrea (Grupo México,
minería) ya estarían pagando cárcel por envenenar ríos en Sonora.
Conflictos por el agua en Chihuahua
Todavía están presentes los asesinatos sin resolver de Ismael
Solorio y Manuelita Solis, dirigentes de El Barzón en octubre del 2012 y
relacionados con el robo de agua por la comunidad menonita. Así como este caso,
hay disputas donde están involucradas compañías mineras y poblaciones rarámuris
en la Sierra Tarahumara opuestas al uso irracional del agua y, más
recientemente, nos enteramos de su falta de suministro en lo que queda del casi
extinto “Valle de Juárez” al oriente de Ciudad Juárez. El agua de Chihuahua se
está acabando y todavía falta por venir la industria petrolera transnacional
con sus técnicas de extracción hidráulicas para gas esquisto, esto último
gracias a la reciente reforma energética.
El
agua no es una mercancía