viernes, 12 de marzo de 2010

Juárez, bajo Estado de excepción no declarado

(Escrito para la revista Aserto, número 80, marzo del 2010, pp. 6-9, Chihuahua)


Vigilar y castigar
Michel Foucault

El contexto sociológico

Febrero se caracteriza por ser un mes corto, rápido, pero los primeros veinte días del presente se viven con una intensidad pocas veces vista en Ciudad Juárez. Los acontecimientos sangrientos de la masacre estudiantil de Villas de Salvárcar a finales de enero, más la respuesta despectiva y errada del ejecutivo federal son el detonante de una larga serie de manifestaciones con todo tipo actores sociales bajo una causa común: el regreso a la paz social. Ha sido y es tan ensordecedor el grito de las y los juarenses contra la violencia, que es inevitable ignorarlos.

La presión ejercida desde Ciudad Juárez fuerza la venida de Felipe Calderón y todo su gabinete (la tercera y cuarta visita en tres años) para entablar una especie de diálogo entre los tres niveles de gobierno y representantes invitados de la sociedad civil que lleve a encontrar soluciones aplicables a la ciudad. La sociedad juarense recibe con escepticismo las ofertas del programa “Todos somos Juárez” advierten ya no creer en discursos e insisten en exigir resultados inmediatos.
Estos veinte días son una verdadera catarsis para la sociedad juarense. Las imágenes ofrecidas por la televisión y el Internet alcanzan a mostrar sólo una pequeña parte del estado de ánimo juarense en estos momentos. Los sentimientos encontrados de miedo, inseguridad y desesperación se mezclan con el estrés, la irritación, la ansiedad y la depresión canalizándose a través del enojo, la agresividad, la angustia, pasando a convertirse en una clara consigna: que renuncien Calderón, Reyes Baeza y Reyes Ferriz. La ciudadanía por iniciativa propia empieza a tomar interés por su destino y está expectante de obtener las respuestas largamente negadas de las promesas de un gobierno tras otro.

 El caso más conmovedor y emblemático de estas manifestaciones es el de Luz María Dávila, quien perdió a sus dos únicos hijos en la masacre de Villas de Salvárcar, la que llaman Madre Coraje, por confrontar desde sus entrañas a Calderón y sintetizar en menos de cinco minutos lo que muchos no se atreven a reclamarle, comenzando con el ya famoso “para mí usted no es bienvenido”. Casi al mismo tiempo, afuera del recinto donde se celebra la reunión del 12 de febrero, estudiantes, activistas y familiares de las víctimas son reprimidos por elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP). Ese día, durante el tiempo que dura el evento, tres personas más son ejecutadas en los suburbios de Juárez.

Las y los jóvenes son otro actor emblemático de las manifestaciones actuales. El grueso de la población asesinada es joven, sean estudiantes, trabajadores o delincuentes, quienes se han visto más vulnerables ante la crisis de seguridad y la económica, factor que subyace también en el meollo de la problemática de la violencia. Contra ellos y ellas también recaen las acusaciones de menosprecio y criminalización de los medios de comunicación, principalmente los televisivos, al destacar y denostar sus acciones en contra de la militarización y la exigencia de renuncia de Felipe Calderón. La violencia de las manifestaciones, que no ha pasado del graffiti de protesta y las consignas políticas, comparada con el uso de la fuerza policiaco-militar y sus intimidaciones cotidianas de los retenes y cateos, más los mil casos documentados de violaciones a los derechos humanos por parte del ejército, no tienen parangón.

Protagonismos, ausencias y suspicacias

Las dos reuniones del programa “Todos somos Juárez” conducidas por las cabezas de los tres niveles de gobierno, pero supeditados por el gobierno federal en la figura de Calderón, de entrada muestran una actitud conciliadora hacia la sociedad juarense, a la cual (dicen) viene a escuchar para encontrar soluciones juntos. Es innegable el aparatoso despliegue de medios y seguridad para cubrir los eventos, a los que sólo se puede acceder exclusivamente por invitación, aunque a veces ni con ella.



Adentro las cosas no son fáciles, en la reunión del jueves 12 son muchas las voces exigentes y críticas, muchos los reclamos y pocos los aplausos. En la del miércoles 17 siguen las críticas, pero bajan el nivel de exigencia al tiempo que aumentan los discursos aduladores y la invitación al evento se hace más selectiva; aparentemente hay un público más favorable a la conducción del ejecutivo, centro del poder moderador de la reunión. Las figuras del gobernador, el presidente municipal y la representación del Congreso se desdibujan ante la mayoría de secretarios federales, en donde se intenta además, que las voces ciudadanas invitadas lleven las propuestas de trabajo y protagonicen junto con Calderón, el evento.

De las dos reuniones hay dos posiciones claramente distinguibles. La primera es la abrumadora incredulidad crítica de las mesas participantes y sus conclusiones hacia las tres esferas de gobierno, donde parece nadie queda satisfecho con los compromisos asumidos por el Estado. La otra es la inamovible respuesta en defensa de la milicia que hace Calderón, la de mayor firmeza y convicción: los militares no salen de Ciudad Juárez, con lo cual se prosigue con esa política militarizada de Estado policiaco que es precisamente una de las principales quejas de la sociedad juarense hacia la estrategia de seguridad implementada a través de los finalmente inoperantes Operativos Conjuntos, cuyos pobres resultados son muestra elocuente de la incapacidad del Estado por ofrecer condiciones mínimas de protección a su población y el punto neurálgico de las crecientes exigencias por las cuales comparecen a trabajar los tres niveles de gobierno en Ciudad Juárez.

Parte de la bien fundada incredulidad de las y los juarenses hacia el ejecutivo federal, es la exclusión del tema de derechos humanos y peor aún, la exclusión de algunos de los participantes de esa mesa, particularmente de la activista Cipriana Jurado y el diputado Víctor Quintana. Esta mesa resultó ser la más combativa e incómoda para Calderón, pues su propuesta exige el retiro inmediato de la milicia y la rendición de cuentas de los abusos y violaciones perpetrados por esta institución hacia la población, lo cual se antepone frontalmente con la posición guerrerista calderoniana. Igualmente son acalladas o disipadas las manifestaciones que exigen la revocación de mandato de Calderón y/o la desaparición de poderes en Chihuahua y Ciudad Juárez.

Otras exclusiones o ausencias no menos importantes, pero sí evidentes son la juventud, la mujer y la niñez. Siendo estos actores los más vulnerados en los dos años de operativos en la ciudad y aun antes, no son figuras principales de las mesas de trabajo; mejor se invita a las iglesias evangélicas y católica, a las inmobiliarias y a los medios de comunicación, que seguro algo tienen que decir y aportar, pero no representan más que a ellos mismos. Es interesante notar en estos dos eventos cómo hay un mayor interés por las instituciones que por los actores; es decir se prefirió trabajar con representantes de instituciones (académicas, empresariales, religiosas, ONG´s) que finalmente terminan por representar sólo una parte de la sociedad, que instalar mesas de trabajo más amplias e incluyentes con las y los directamente afectados. La montaña vino a ellos, pero no se acercó demasiado.

Otro punto neurálgico de recelo social es la cuestión electoral. Las visitas de Calderón anuncian también la atracción de recursos extraordinarios para enfrentar el crónico rezago social de la ciudad, un recurso por cierto seriamente cuestionado por su supuesto engaño (ver el interesante artículo de Hernán Ortiz en su columna Desde Juárez, http://www.arrobajuarez.com/notas.phpIDNOTA=15508&IDSECCION=DesdeJuarez&IDREPORTERO=Hernán Ortíz) que en medio de las campañas y precampañas electorales, resultan por demás polémicas, pues se perciben intenciones más allá de la ayuda a la ciudad. Para nadie es secreto el desprestigio que gozan los partidos y políticos en esta ciudad fronteriza y el elemento dinero conlleva a suspicacias sobre qué candidato o partido saldrá beneficiado con la ayuda anunciada.

Discurso y propuesta calderoniana



El discurso conservador de Felipe Calderón permite ver claramente su posición ideológica, sus debilidades y carencias, así como su ética de trabajo. Lo que inicialmente se presenta como diálogo entre gobierno y sociedad, en realidad es una justificación autocomplaciente para demostrar el interés del ejecutivo en el tema. En general no se percibe un compromiso serio (no se establecen fechas límite ni se va el ejército) para resolver el problema de inseguridad en Juárez.

En sus dos intervenciones Calderón se afana por justificar la presencia del ejército y la PFP en la frontera. Acusa a la ciudad de violenta y no que la violencia aumenta con la llegada de estas instituciones armadas. Para Calderón Ciudad Juárez es un caso paradigmático donde la decadencia de la vida social humana es inminente y requiere de una intervención dura y ejemplar. Incapaz de reconocer los errores de la estrategia de la “guerra contra el narcotráfico”, se aferra a defenderla y acusa a sus no pocos críticos de detractores, considerándolos como enemigos de las instituciones, lo que equivale a entender el porqué de la criminalización de la sociedad juarense y la represión, hostigamiento y asesinatos de líderes sociales y activistas derecho humanistas.

La propuesta calderoniana más clara y precisa al clima de inseguridad, es más policía y presencia militar. El autoritarismo del discurso de Calderón ofrece una visión chata, limitada en su percepción particular influida por lo que él llama “la erosión de los valores universales (haz el bien, evita el mal)”. Esta posición maniquea de clara influencia católica responsabiliza a la ausencia de familia (sic) como el origen de las circunstancias que vivimos actualmente en Ciudad Juárez. La llegada de la maquila y la migración dice, cambió la estructura familiar en Juárez: madres solteras, niños desbalagados, aumento del consumo de drogas, aumento de la delincuencia; las y los jóvenes “no tienen familia y no creen en ella”, comenta Calderón para dar a entender el tamaño de la problemática de Juárez.

Este tipo de discurso es engañoso por que deslinda al Estado de su responsabilidad social y acusa a la familia, institución infinitamente más pequeña y frágil, de todo lo malo que le sucede. Es también ofensivo, intolerante y discriminatorio por que sugiere que sólo la familia nuclear propuesta por el cristianismo (papá, mamá, hijos) puede influir en mejores sociedades. Además se acusa indirectamente a las familias uniparentales o no tradicionales de producir prole tendiente a delinquir. Eso significa que todas aquellas personas que somos fruto de este tipo de familias somos criminales en potencia.

Por otro lado el discurso del “camino de la ley” anunciado por Calderón, invita a reconstruir la sociedad “sobre la base de la ley y el derecho”, pero al identificarse como partidario del “comercio libre” y al confundir la anarquía con la anomia, se deslinda de la situación provocada precisamente por ese tipo de visión neoliberal que él representa: un sistema basado en las leyes del mercado (que en realidad es un sistema caótico violatorio de reglas) por encima del poder del Estado da como consecuencia un gobierno anómico, pues no respeta leyes (la anarquía es la ausencia de gobierno, no de leyes).

Síntesis

Seguramente habrá muchas cosas que aclarar antes de poder solucionar el problema de la violencia en Ciudad Juárez, como el trato indistinto ante la misma problemática a otros estados como Sinaloa o Morelos; el aspecto internacional del problema de las drogas o el porqué no se han investigado las multimillonarias cuentas bancarias y el lavado de dinero de los cárteles. Mientras tanto los asesinatos en este Estado de excepción no declarado que es Ciudad Juárez continúan.

Oi! Oi! Oi! Un foro con madres

jueves, 11 de marzo de 2010

¿Y si gana el Teto?

No tiene la culpa el indio, sino el que lo hace compadre
Refrán popular mexicano

Propiamente, para ser malo, no necesitas quebrantar la ley.
Basta con que la observes a la letra.
Anthony de Mello

Ciudad Cárcel, Chihuahua, mes de la reivindicación de las mujeres y del natalicio de Benito Juárez. Ese día creí que soñaba, pero en la noche tuve pesadillas; no lo podía creer ¡EL Teto candidato a presidente! Parecía un mal chiste, uno de esos que cuentas para burlarte de la estupidez humana, pero no, era cierto, la noticia amanecía en todos los periódicos y luego por la noche a través de los noticieros televisivos locales: en Chihuahua se había elegido al candidato de unidad del PRI por la candidatura del municipio de Juárez, al ingeniero Héctor “Teto” Murguía Lardizábal.

Justamente en la mañana decía Itzel sobre la película de Alicia en el país de la maravillas de Tim Burton, que la reina de corazones le recordaba a políticos como el Teto porque tenía corazones por todas partes en su palacio; es decir, tenía una necesidad inmensa de amor, de que la amaran, como hacen efectivamente en la vida real los políticos con sus anhelos de reconocimiento, de ser amados por el pueblo, convirtiéndose luego en temibles gobernantes crueles, así bailen, hagan muecas o sean su propia caricatura para ganarse simpatías baratas.

El trienio neopopulista del Teto (2004-2007) verdaderamente es uno de los más polémicos que se tenga memoria, sino es que el más. Son tantas y tan conocidas las tragedias, conflictos, violaciones, engaños, encubrimientos, sospechas y demás, que hasta resulta ocioso escribir de ellas, ¿quién no conoce al Teto?, en verdad sí es un político muy conocido en la Frontera Juárez-El Paso, no se necesitan encuestas para saberlo. Pero lo que las encuestas no pueden hacer es medir la percepción de la gente en cuanto a lo que sienten o les provoca el Teto, eso es otra cosa que sólo con instrumentos más finos, como los grupos focales, se puede lograr.

Mucha gente de alguna manera festejó cuando se supo oficialmente a principios del 2010, que el candidato a gobernador (sic) por el PRI era César Duarte y no el Teto, porque eso significaba al menos un peligro menos para el estado, independientemente de que Duarte u otro candidato o partido llegase a ganar, pues ya de antemano no se tenía pensado votar, que es el caso de la mayoría de las personas en posibilidad de hacerlo en Chihuahua. Sin embargo nadie sospechaba que sucediera esta situación, ¿cómo llamarla?, ¿cínica?, ¿audaz?, ¿burlona?, ¿temeraria, retadora, amenazante?

En estos tiempos de escepticismo socialmente expandido, donde se acusa de una pérdida de valores a la sociedad, como siempre, buscando distorsionar la realidad desde sus propios gobiernos con la ayuda de intelectuales, religiosos y pseudoperiodistas. Cosa imposible porque existe una verdadera decadencia concurrente ya muy vista en los libros de historia y documentales sobre el comportamiento disoluto de las clases dominantes, llámense aristócratas, burguesas políticas o neoliberales, cuando llegan a extremos de incongruencia y se convierten en un peligro para la sociedad, el reino, la nación o como quieran llamarle, porque después del terror y el miedo, viene el hartazgo y la respuesta de la gente, ¿a qué juegan?

Por el comportamiento de sus dirigentes nacionales e históricos, podemos conocer las formas de actuar de la clase política simplemente a través de lo que nos enseñan los noticieros televisivos para aumentar sus noticias transformadas en shows de acción y entretenimiento dramatizado y así atraer a la teleaudiencia: intrigas, engaños, traiciones, pactos secretos descubiertos, corrupción, negocios turbios, práctica delictivas, violaciones a las leyes, en fin, ¿qué no hemos visto en Televisa, Azteca y los canales locales? Pero cuando pensamos que lo hemos visto todo, ¡zas! El Teto, haciéndonos recuperar nuestra capacidad de asombro tan derrotada y aterrada por la guerra contra el narco ¡gracias Teto! Aunque ya no sabemos si llorar, reír o ladrar.

El retorno ¿político? del Teto, legislador de la actual legislatura federal asumida hace apenas unos meses, no sólo nos debe recordar la poca seriedad con la que se toman las campañas políticas, el despilfarro de recursos para que al final el vencedor salte a otro puesto que se le atraviese, también nos debe poner a pensar en las razones, pactos, conveniencias e intereses ocultas detrás de la candidatura del Teto, porque los políticos juegan a ganar, no a competir, pero como no juegan limpio, no sabemos lo que traman, ¡cuidado!

Sea como sea, el Teto tiene que hacernos reaccionar como sociedad (ya lo está haciendo) y verlo como un avatar más de un sistema en decadencia que nos enseña sus entrañas carcomidas por el cáncer; un ejemplo más de porqué tienen que cambiar las cosas en esta ciudad, este estado y este país. ¡Qué bueno!, que bueno tener de regreso al Teto, porque nunca se fue; porque ahora será imposible que nos hagamos pendejos e ignorarlo, pero si no reaccionamos con él, entonces como sociedad estamos muertos, no dormidos, muertos(as).


¿Más problemas? ¡No elecciones!

Revolución MMX

martes, 9 de marzo de 2010

Manifiesto de la Kolectiva Fronteriza

En el marco de la conmemoración del dia internacional de la mujer trabajadora, desde la Kolectiva Fronteriza queremos manifestar nuestra solidaridad con todas las mujeres de Ciudad Juárez.


La KF somos somos un grupo de mujeres jóvenes (la mayoría), estudiantes, trabajadoras, profesionistas, artistas, amas de casa, mamás y activistas que aprovechando nuestras ideas, propuestas y habilidades colectivas nos organizamos para desarrollar en conjunto una propuesta creativa y novedosa de resistencia al sistema patriarcal y capitalista de nuestra frontera.

El 8 de marzo, tiene un significado especial para el movimiento feminista ya que se cumplen los primeros cien años de un camino iniciado por muchísimas mujeres valientes y comprometidas para lograr el pleno reconocimiento y respeto de nuestros derechos humanos.

Estamos convencidas que con nuestro trabajo remunerado o no, nuestra iniciativa, participación y energía las mujeres hemos sido históricamente uno de los principales motores de esta ciudad fronteriza. Hagamos memoria y recordemos de quién era la mano de obra con la que se sostuvo durante muchos años y se sigue sosteniendo la industria maquiladora en la ciudad: las mujeres, un gran porcentaje de ellas jóvenes. La cuestión, es que mientras los dueños de esas fábricas ganan millones de dólares, aquí las obreras tienen salarios mínimos y otro tipo de condiciones laborales bastante deplorables. También, es interesante descubrir cómo el llamado “quehacer” de las amas de casa contribuye a la economía local y pensemos en todas esas horas dedicadas a limpiar, a lavar, planchar y hacer la comida para que quienes salen a laborar fuera de casa estén nutrid@s, limpi@s y descansad@s, y sin embargo, este trabajo aparte de no ser pagado se vuelve invisible.

El trato que se nos quiere seguir dando como ciudadanas de segunda categoría nos hace ser conscientes de que es importante seguir en la lucha por nuestros derechos. Ciertamente, nos toca a todas contribuir ante un contexto que ha ido cambiando en los últimos tiempos Estamos viviendo situaciones que nunca antes habíamos experimentado como lo es la ocupación militar de nuestra ciudad y la extrema violencia originadas en parte por un capitalismo cada vez más rapaz y una violencia cada vez más gore.

Ante una realidad que no se puede negar, porque quienes vivimos aquí la vemos, la olemos, la sentimos diariamente en las calles, creemos que las mujeres jóvenes somos una fuerza revolucionaria y que con nuestras distintas experiencias, miradas, nuestras formas de organización y expresiones políticas, artísticas y culturales vamos por ahí transformando y reivindicando lo que somos y lo que queremos ser y lograr desde, con y para las mujeres. Para llevarlo a cabo, confesamos que tenemos varias aliadas entre ellas se encuentra doña Imaginación, Ima de cariño, quien nos ayuda a crear, a hacer mucho con poco y a que fluyan otros recursos. La otra es doña Lucha, quien nos hace recordar porque hacemos lo que hacemos y a no perder de vista el objetivo.

Para terminar, desde la Kolectiva Fronteriza queremos expresar que nos sumamos al arranque de las actividades de la Tercera Acción Internacional de la Marcha Mundial de las Mujeres 2010 ¡Mujeres en Marcha hasta que todas seamos libres! Y reivindicamos que:



¡NI BALAS NI MILITARES, VIVA LA LUCHA DE LAS MUJERES!

A 8 de marzo de 2010

Ciudad Juarez, Chihuahua, Mexico

Reportaje sobre Hip-hop de protesta en Juárez

lunes, 8 de marzo de 2010

Semana Conmemorativa por los Derechos de las Mujeres

Convención Nacional de Consumidores

Carta de organizaciones e intelectuales repudiando las amenazas contra bases de apoyo zapatistas

4 de marzo del 2010.


A la Opinión Pública


Desde el 12 de enero de 1994, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) se comprometió, con la sociedad civil nacional e internacional, a no realizar ningún tipo de acción armada ofensiva en contra del gobierno federal, estatal o municipal. Desde entonces, el EZLN ha hecho honor a su palabra, a pesar de la existencia de una fuerte militarización en su territorio y de la creación de diversos grupos paramilitares, los cuales, de una manera recurrente, han provocado enfrentamientos, sin que hasta el momento logren su objetivo.

Ahora, la Junta de Buen Gobierno “El camino del futuro”, del Caracol de “Resistencia hacia un nuevo amanecer”, en La Garrucha, denuncia que han caído en sus manos documentos donde el grupo paramilitar de la Organización Para la Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos (OPDDIC), de filiación priísta y perredista (según dicen los propios paramilitares), preparan un ataque en forma para desalojar a los zapatistas de Santo Domingo, utilizando armas de fuego e incluso bombas.

Originalmente, la acción se tenía planeada para el 20 de marzo, sin embargo, se adelantó para el 5 de este mismo mes.

Nosotros, que hemos acompañado a los zapatistas en su lucha por una paz con justicia y dignidad nos ponemos en alerta ante esa amenaza y señalamos a los tres órdenes de gobierno, el ejecutivo, el estatal y el municipal, lo mismo que a las fuerzas armadas ahí acantonadas, como los directamente responsables de cualquier ataque.

Sabemos de la fuerza de voluntad de nuestros hermanos zapatistas para, al mismo tiempo, resistir en la defensa de su tierra y mantener su palabra de no realizar ninguna acción ofensiva.

Llamamos a los mexicanos e internacionales de buena fe a que se pronuncien y estén vigilantes.

Gruppe B.A.S.T.A. (Münster/Alemania)

Asociacion Ya Basta Italia

Coordinamento Toscano di Sostegno alla lotta zapatista. Italia

Colectivo ALANA (Solidaridad, Resistencia, Dignidad) Grecia

Cooperativa de Comercio Solidario “LA SEMILLA” Grecia

Colectiva de Trabajo-Cooperativa “EL CAMINO” Grecia

UFU - Universidad Free Underground Grecia

Grupo Les trois passants, Francia

Grupo IRU (Estado Español)

Plataforma de Solidaridad con Chiapas de Madrid

Confederación General del Trabajo (CGT) del Estado Español

Caracol mundo-eco de latido en solidaridad. Austria

Association Espoir Chiapas / Esperanza Chiapas, Francia

La Reus, Cultural i Solidària per la Pau, Reus, Catalunya, Europa

Centro de Documentación sobre Zapatismo (CEDOZ), Madrid





Sylvia Marcos

Paulina Fernández

Fernanda Navarro

Luis Villoro

Jean Robert

Ronald Nigh

Gustavo Esteva

François Houtart

John Berger

Immanuel Wallerstein

Walter Mignolo

Javier Sicilia

Guillermo Villaseñor García

Raúl Fornet-Betancourt

Aldo y Brunella Zanchetta

Jérôme Basche

Mercedes Olivera

Pietro Ameglio

Myriam Fracchia

Benno Glauser

Carlos Aguirre Rojas

Sergio Rodríguez Lascano

Raymundo Sánchez Barraza.







--

negrO.



Me voy con la lagartija

vertiginosa

a recorrer las celdas donde

Mariana, Nacho, Felipe, Guillermo

Fernando, Magdalena, Sacramento, David

Penan por todos y resisten

Voy con la lagartija

popular

vertiginosa

a dejarles aqui y allá

por entre los barrotes

junto a las cicatrices

o sobre la cuchara

migas de respeto

silencios de confianza

y gracias...

por que existen.



mario benedetti.